¿Qué es el síndrome de Noé?
Es el nombre coloquial de a lo que en psiquiatría se denomina como trastorno de acumulación de animales. Es un desorden psiquiátrico que lleva al individuo a acumular de forma obsesiva un gran número de animales de compañía, a los cuales no les proporciona los cuidados básicos y necesarios. Además de un problema de salud mental también se convierte en un problema de salud pública, ya que no sólo afecta al individuo que lo padece, si no también afecta a los animales que ha acumulado y en muchas ocasiones el tema de insalubridad puede afectar al vecindario. Aunque no son igual este trastorno guarda también relación con el síndrome de Diógenes (acumulación de objetos).
En 2012, la Doctora Paula Calvo y el resto del equipo de la Cátedra Fundación Affinity Animales y Salud publicaron el primer estudio sobre el Síndrome de Noé en España (y primero también en Europa). El estudio analizaba la situación de 24 casos, con un total de 1.218 perros y gatos involucrados. Sobre las conclusiones obtenidas, Calvo explica que la acumulación de animales debería ser considerada y reconocida como una forma clara de abuso animal y tenencia irresponsable:
«Los animales requisados en casos de Síndrome de Noé muchas veces tienen que ser eutanasiados debido a su pésimo estado de salud. El resto, habitualmente requiere atención veterinaria y, además, muestra graves problemas de comportamiento. Eso quiere decir que no son perros o gatos fácilmente adoptables. Y, por lo tanto, el trastorno de acumulación de animales se convierte en un problema con graves consecuencias tanto emocionales como económicas para las personas e instituciones de protección animal que trabajan con los animales rescatados.
Nuestro primer caso de síndrome de Noé…
A mediados del 2017, fuimos informados de una persona mayor que sufría de este trastorno y que había acumulado una gran cantidad de animales que se encontraban en pésimas condiciones, cuando nos apersonamos en el lugar no nos imaginábamos lo duras que serían las imágenes.
Cerca de 200 animales malvivían en esa casa, vivían entre basura, animales que habían fallecido, fetos de animales muertos, etc. Muchos gatos se encontraban en muy malas condiciones incluso hubo que solicitar ayuda de otras protectoras para que pudieran asumir el rescate de más animales que se encontraban en esa casa.
Tuvimos que realizar varias operaciones (amputaciones, extracciones oculares, esterilizaciones, extracción de piezas dentales) y eutanasias de muchos animales que ya no podían ser salvados. Fue increíble lo que se encontró dentro de esa casa, no hay palabras para describirlo, sólo dolor y tristeza. Asumir este caso supuso un duro golpe a nivel emocional y económico para la protectora, tuvimos que gastar miles de euros para poder hacer frente a este caso.
Una año después de este caso, quisimos hacer un vídeo informando del caso y agradeciendo a aquellas personas implicadas os dejamos aquí debajo:
Leave a Reply